La esencia del proyecto arquitectónico es pensar en el papel del espacio que se intuye para su concreción posterior, es la posibilidad de vislumbrar lo tridimensional, la luz y el movimiento en la bidimensionalidad del dibujo, de coordinar en él las múltiples variables y su articulación.
Para el arquitecto profesional el dibujo es un instrumento fundamental, pues al hacerlo planea construcciones.
Por eso, lo importante es que al dibujar el arquitecto plantee una espacialidad y su tectonicidad pensando en los espacios que imagina construidos y no en los grafismos que traza.
Son espacios construibles lo que el arquitecto dibuja, donde además debe ser posible realizar las funciones para las cuales se proyecta; son formas permanentes en el tiempo que requieren una técnica constructiva visualizada también por medio del dibujo y por supuesto, producto de una decantada práctica de obra. La asignatura busca establecer los referentes fundamentales para lograr este cometido en todos los procesos de representación inherentes al manejo del proyecto arquitectónico.
